El Alfa Romeo Giulia es el modelo que necesita el segmento D premium. Las firmas alemanas han dominado con puño de hierro esta parcela y necesitaban que otra foránea les moviera el tapete. Cierto, el sedán italiano no va a romper moldes ni cifras de ventas, pero supone un peligro constante al que hay que temer. Y más ahora, que se ha puesto a punto con un sutil restyling que mejora todo aquello en lo que se quedó rezagado.
Hace unos días mi compañero Diego Ávila lo estuvo probando junto a su hermano Stelvio. En general las sensaciones son mejores que antes, aunque mantiene su esencia italiana por los cuatro costados. De esta forma, encontramos una berlina de diseño impecable que, como otras de la marca, pasarán a la posteridad. A ello hay que añadir un interior de calidad revisada y con un equipamiento que, sobre todo, mejora en seguridad.
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Las mejoras en el Alfa Romeo Giulia son sutiles pero efectivas
Con todo, la evolución del Alfa Romeo Giulia ya está disponible en el mercado español. Su oferta, está estructurada en torno a cuatro terminaciones conocidas en la firma. De menor a mayor dotación están los Super, Sprint, Veloce. En la zona superior está la más deportiva y radical Quadrifoglio Verde que, sin fecha definida de forma oficial, se verá acompañada por la mítica Ti.
Desde la terminación Super el renovado Giulia incluye elementos como faros Bi Xenon 25 W, llantas de aleación de 17 pulgadas modelo turbina, climatizador o retrovisor interior electrocromado. Completan esta dotación el asistente de frenada de emegerncia (AEB), sistema avisador cambio involuntario de carril, pantalla central táctil de 8,8 pulgadas con Apple CarPlay y Android Auto o radio digital DAB con dos tomas USB.renderAd(,36166);
La opción Sprint amplía estas posibilidades incluyendo elementos como pack Driver Assistance, pack Convenience, llantas de