Pese al ERTE por causas de fuerza mayor iniciado ahora hace dos semanas, SEAT mantuvo cierta actividad en Martorell centrándose en la producción de respiradores y mascarillas mediante impresión digital ante la extrema necesidad de estos equipos sanitarios.
Esta producción ha tenido que detenerse debido simplemente a problemas burocráticos: faltan los permisos necesarios para que los respiradores producidos por SEAT se puedan homologar.
La automoción arrima el hombro, pero con trabas
Cualquiera con el músculo industrial suficiente puede ponerse a fabricar respiradores, pero todo el material tiene que cumplir unas normas básicas. SEAT inició la fabricación de los respiradores OxyGEN diseñados en colaboración Protofy.XYZ, empleando para ello una cadena de montaje e implicando a 150 personas.
Ahora todos estos trabajadores han tenido que volver a sus casas desde ayer miércoles porque el Ministerio de Sanidad no ha establecido unos requisitos mínimos genéricos. Sin cumplir estas directrices la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios no puede dar la homologación y, por lo tanto, dichos respiradores son inservibles.
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Según ha declarado Martías Carnero, presidente del comité de empresa se SEAT, falta un certificado de electromagneticidad. Una garantía de que este respirador no va a causar interferencias con otros dispositivos utilizados en las UCIs hospitalarias. «Es un exceso de burocracia, mientras que lo que se trata es de salvar vidas», se lamenta Carnero.
Pese a que desde el Ministerio de Sanidad se comprometieron a facilitar los