La evolución del sector del automóvil hacia la hibridación y electrificación es inexorable. Los diferentes constructores se han sumado a ella a su ritmo, y en estos momentos ninguno reniega de tal cambio. El Grupo FCA es uno de los que ha dado el salto más tarde, aunque sus rivales, exceptuando a Toyota y Honda, tampoco le llevan gran ventaja. Uno de los últimos modelos en sumarse a esta corriente es el Lancia Ypsilon Hybrid EcoChic.
Sí, este veterano modelo que vio la luz del sol en 2011 aún está a la venta. Como sabéis, porque os lo hemos contado muchas veces, sólo está disponible en su país natal, Italia. Y la razón para que el consorcio italoamericano no haya acabado definitivamente con la marca es sencilla: es el rey del segmento A. Tan grande es su popularidad, que con el lanzamiento del Lancia Ypsilon Hybrid EcoChic celebran los 3 millones de unidades producidas.
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El Lancia Ypsilon Hybrid EcoChic apuesta por la eficiencia
Por tanto, esperan que con la llegada de la mecánica Mild Hybrid mantenga su liderato hasta que pueda llegar un relevo. De las bondades de su nueva mecánica y la sencillez técnica ya os hablamos en un post anterior. Ahora es el momento de conocer cómo Lancia articula la gama de su Ypsilon Mild Hybrid. Como era de esperar, la personalización se mantiene a gran altura, estrenando el tono Blue Maryne con acentos en gris oscuro.
Estos elementos se reparten por zonas como la parrilla delantera, el bigote que porta el logo central o las coquillas de los retrovisores o manillas de las puertas. Además, el paragolpes cuenta con apliques acabados en negro brillante a contraste con los que lucen las llantas de aleación de 15 pulgadas. Pero además, para que el público sepa que está ante una versión ecológica, han situado el