Aunque el Ford Bronco y el Mercedes-Benz Clase G no comparten espacio comercial, sí lo hacen en cuanto a público objetivo. Es por esta razón, que los principales rivales del modelo americano, entre los que también se encuentra el Jeep Wrangler, están reforzando sus argumentos. En un primer momento fue el Grupo FCA el que atacó presentando novedades de equipamiento y una versión Rubicon de elevado rendimiento.
Pues bien, ahora Daimler AG mueve ficha y presenta una ligera actualización para el Clase G. El todo terreno alemán lleva décadas como rey indiscutible de su segmento, pero ello no quita para que el público pueda mirar para otro lado. Por tanto, ahora que está atravesando el ecuador de su ciclo comercial se pone «guapo» para atraer a un mayor número de clientes. Con todo, no esperes grandes alardes, pues es un tipo elegante que presume lo justo.
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La imagen del Mercedes-Benz Clase G sigue siendo robusta y diferencial
Gracias de la mano del programa G Manufaktur, el Mercedes-Benz Clase G modifica su impronta. Las líneas básicas de diseño no varían, pero sí llegan nuevas opciones de personalización, como por ejemplo el paquete Night Package con detalles en negro obsidian metalizado y cristales tintados. El Pack Acero Inoxidable sigue disponible, ofreciendo apliques terminados en este material para la rueda de repuesto, estriberas o maletero.
En la vista lateral apreciaremos unas llantas de aleación de 20 pulgadas. Sólo están disponibles en el Pack AMG Line y estrenan diseño de cinco radios dobles y acabado brillantes. Por último, para vestir la carrocería aparecen tres tonos completamente nuevos: G manufaktur deep green uni, classic grey uni y G manufaktur china blue uni. Para acabar con las modificaciones, debemos echar un vistazo a su interior, donde incrementa la dotación.renderAd(,36166);
Cuando el renovado Mercedes-Benz Clase G llegue al mercado, serán de serie