En los últimos años, Opel ha destacado por enorgullecerse de sus asientos ergonómicos con certificado AGR desde que los ofreciera por primera vez en el Signum en el año 2003. Diecisiete años después, en 2020, la marca continúa ofreciendo dicho certificado, en esta ocasión con los asientos del nuevo Astra, los cuales de unen a los equipados en los actuales Insignia, Grandland X y Crossland X.
¿Cómo son los asientos de Opel con certificado AGR?
Los asientos son el principal elemento que nos conecta al coche y por el que recibimos toda la información, además del volante, de ahí la importancia de que sean lo más ergonómicos posibles con el objetivo de evitar dolores de espalda y otros problemas como fatiga, tensiones musculares o incluso dolor de cabeza. Así, una de las claves para conseguir una adecuada postura al volante es que dispongan de múltiples reglajes para adaptarse a todo tipo de fisionomías, desde conductores bajitos hasta los más altos, desde los más delgados hasta los más corpulentos. De hecho, los asientos del Astra cuentan con 8 regulaciones manuales, banqueta extensible y regulación lumbar ajustable en 4 vías y 18 direcciones. Con todo ello, Opel consigue que sus asientos de adapten a más del 95 % de los conductores.
Otro aspecto a destacar es la denominada climatización pasiva del asiento, que consiste en usar tejidos transpirables y una espuma lo suficientemente rígida y con perforaciones, que al sentarse el ocupante actúan como unas ventosas, creando una pequeña circulación de aire y eliminando la humedad.
Por otro lado, cuentan con una estructura lo suficientemente rígida y robusta, al igual que la unión del reposacabezas, contribuyendo a que la columna adopte una posición adecuada además de proporcionar una sujeción óptima del torso y la pelvis. Finalmente, elementos opcionales como la calefacción, ventilación o la función de