La Fiscalía de Múnich ha anunciado que ha presentado cargos de fraude contra tres antiguos miembros de la junta ejecutiva de Audi y contra un exgerente por el escándalo Dieselgate, que hace dos años provocó la destitución del que fuera CEO de la marca, Rupert Stadler.
Según informan medios alemanes, los cuatro »están acusados de fraude, certificación falsa indirecta y publicidad criminal».
Será un largo proceso
No se conoce la identidad de los acusados, de los que se sospecha que conocían las manipulaciones en los motores, equipados con dispositivos de desactivación, y aún así no impidieron la comercialización de vehículos equipados con este software entre octubre de 2013 y septiembre de 2015.
En concreto, 434.420 vehículos manipulados de Audi, Volkswagen y Porsche en los mercados europeos y en Estados Unidos.
Según publica la BBC, los fiscales dijeron que una de las personas mintió a Audi sobre su participación en las manipulaciones antes de su ascenso a la junta en 2016.
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Por su parte Audi ha confirmado los cargos en un comunicado, diciendo que continuará «cooperando plenamente con las autoridades investigadoras para reconstruir las circunstancias que llevaron a la crisis del diésel».
Hace un año la Fiscalía de Múnich presentó cargos contra el que fuera CEO de Audi, Rupert Stadler, por su supuesta implicación en el Dieselgate. El exdirectivo fue arrestado en junio de 2018 en Alemania por presunto fraude, falsificación de certificados y publicidad falsa en el mercado