Impresionante carrera la que hemos vivido en Silverstone. Lewis Hamilton se ha llevado una victoria épica cruzando la línea de meta con una rueda pinchada ante un ridículo tremendo de Red Bull, que se centró en hacer la vuelta rápida y perdió la carrera con Max Verstappen. Hamilton logra su tercera victoria consecutiva y la séptima en Silverstone.
El caos se desató con los neumáticos en las últimas vueltas. Las gomas delanteras no aguantaron y se fueron pinchando en masa. Mercedes tenía el doblete asegurado hasta que Valtteri Bottas pinchó a tres vueltas del final. Luego le tocó a Carlos Sainz y, en la última vuelta, a Lewis Hamilton, que aún así llegó a meta y ganó la carrera.
A Sainz también le reventó el neumático cuando iba cuarto
Los dos Mercedes tenían la carrera controlada, pero aparecieron los problemas en los neumáticos que les obligaron a bajar el ritmo. Bottas reventó, paró en boxes y se quedó fuera de los puntos, pero en una decisión incomprensible Red Bull decidió entrar en boxes a Max Verstappen para ponerle neumáticos nuevos e ir a por la vuelta rápida.
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Craso error, ya que en la última vuelta también reventó el neumático de Lewis Hamilton. Pero Verstappen ya estaba demasiado lejos para aprovecharlo. El holandés se queda con una amarga vuelta rápida y en segunda posición mientras que Hamilton cruzó la línea de meta con una rueda