El Grupo PSA puede estar muy satisfecho del papel comercial que ha desempeñado el Citroën C-Elysée. La berlina compacta de la casa gala ha sabido ganarse el corazón de aquellos que necesitando un coche, muy sencillo, no quieren renunciar a ciertos elementos. En estos momentos se comercializa en múltiples mercados y en todos ellos con un denominador común: un precio de derribo. Sin embargo, hay una variante que no conocíamos…
Nos referimos al Fukang EV30, la versión que el Grupo PSA ha desarrollado con su socio chino Dongfeng. Viendo uno y otros pensaréis que estamos ante el mismo C-Elysée que conocemos en España. No obstante, sentimos deciros que no, no es tan exacto. A nivel estético las diferencias entre uno y otro son de matiz, pero el aspecto que marca la diferencia está bajo su capó. Sí, porque estamos ante un modelo que se alimenta de ¡electricidad!
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Las autonomía del Fukang EV30 alcanza los 300 kilómetros
A nivel estético, la distancia entre el Fukang EV30 y el Citroën C-Elysée se aprecia en elementos como los grupos ópticos, parrilla o paragolpes. El logo es uno de los elementos más característicos, ocupando una zona mayor que el de Citroën. De puertas adentro observamos una disposición de controles y mandos idéntica así como materiales correctos. El único cambio llega de la mano de un cuadro de instrumentos digital y el logo central del volante.
Con todo, el aspecto que más importa está bajo su piel y tiene que ver con su mecánica. Según publica la marca, el EV30 cuenta con un tren motriz eléctrico de 82 CV y 220 Nm de par máximo. Para alimentarse recurre a una batería (no anuncian cuál es su composición) con 30,7 kWh de capacidad energética. Según el ciclo de homologación NEDC (que aún se emplea en China) la autonomía media estimada es