En los últimos años ha aumentado, notablemente, el número de coches que han sido registrados como baja temporal. Y la Dirección General de Tráfico se ha mostrado preocupada por este fenómeno que, no es menos cierto, puede esconder irregularidades. El fenómeno de los «coches zombis» tiene que ver con vehículos que han solicitado la baja temporal, cuando en realidad, deberían haber sido achatarrados y haber recibido una baja definitiva. De ahí que la DGT esté enviando miles de cartas estos días para advertir a los que podrían ser propietarios de un «coche zombi», sin saberlo.
El fenómeno de los «coches zombis» según la DGT
El año pasado se registraron 132.459 bajas temporales de vehículos, un 50% de las bajas definitivas que se tramitaron en el mismo periodo. En 2004, se registraron 60.982 bajas temporales, que representaban solo un 5% de las bajas definitivas que se registraron ese año. La DGT teme que se estén cometiendo irregularidades y que se estén tramitando bajas temporales de coches que, realmente, deberían haber tramitado la baja definitiva. Las bajas temporales son reversibles, y atienden a una situación temporal, motivos personales, un robo, o la entrega a un compraventa, de manera que el vehículo pueda ser dado de alta de nuevo y regresar a la circulación.
Tras el fenómeno de los «coches zombis» se esconden, muy probablemente, fraudes, coches que deberían haber solicitado una baja definitiva
Las bajas definitivas, en cambio, son irreversibles, y requieren que el vehículo siga los procedimientos establecidos para su achatarramiento y para el correspondiente tratamiento de residuos. Un «coche zombi» es aquel que debería haber tramitado una baja definitiva, pero sigue registrado para una baja temporal.
El temor de la DGT es que tras este fenómeno se escondan fraudes y que existan, en palabras de Tráfico, desguaces irregulares, que estén dando un nuevo destino al