Ya está aquí la cuarta generación del Hyundai Tucson. Un modelo que se lanzó al mercado en 2004, con la segunda generación en 2009 y la tercera en 2015, y que ha totalizado más de 7 millones de unidades comercializadas en todo el mundo. De ellas, casi 150.000 corresponden al mercado español, donde el Tucson también ha sido un éxito en ventas.
Y aunque el modelo saliente todavía tenía recorrido, especialmente desde que se incorporaron las nuevas variantes electrificadas de 48 voltios, el nuevo Tucson mantiene todos los atributos del modelo anterior e incluso los potencia, con una plataforma completamente nueva que admite versiones híbridas y un diseño rompedor. Nosotros ya hemos tenido una primera toma de contacto. Y en conjunto, nos parece uno de los mejores SUV de la categoría.
Entre sus principales virtudes, mejora aún más todo lo relacionado con el confort, tiene más equipamiento tecnológico tanto en lo referido a conectividad como a sistemas de asistencia a la conducción, se coloca entre los mejores en calidad de acabado y terminación y ofrece una gama de motores con opciones para todas las necesidades. Además, el precio sigue siendo muy competitivo.
Diseño exterior e interior del nuevo Hyundai Tucson
Poco vamos a comentar aquí, lo mejor es que veas las imágenes y el vídeo que acompañan al artículo. Mencionar, eso sí, que estamos ante un coche que mide 4,50 metros de longitud, 1,87 metros de anchura y 1,65 metros de altura. Son proporciones, centímetro arriba o centímetro abajo, muy similares respecto al modelo de la generación anterior. También aumenta un centímetro la distancia entre ejes, para alcanzar los 2,68 metros.
Para el diseño exterior, al que Hyundai denomina diseño “paramétrico”, se recurre a multitud de aristas y ángulos, que repiten los motivos inspirados en una joya presentes en la parrilla. Aquí destacan las “luces ocultas paramétricas”: la sensación es curiosa, porque parece como si el Tucson no tuviera grupos ópticos como tales. Particularmente me parece que un diseño tan llamativo puede perder vigencia mucho antes con el paso del tiempo. Pero la apuesta está ahí, y el nuevo Tucson tiene empaque y presencia. La zaga me resulta mucho más atractiva, con un aire incluso deportivo. Se puede elegir entre nueve colores para la carrocería, todos ellos en versiones bitono, combinando el techo en color de contraste.
En el interior, Hyundai aplica lo que denomina diseño “Interspace”, con salpicadero simétrico en el que la consola central cobra un protagonismo especial, con su pantalla multimedia de 10,25 pulgadas. Salvo en las versiones de acabado básico, la instrumentación también es digital y de 10,25 pulgadas, cambiando el modo de visualización en función del programa elegido en el sistema de modos de conducción. La consola central entre los asientos en la versiones automáticas eliminan la palanca de cambios en favor de unos botones, lo que permite liberar espacio. Para la climatización se utiliza el sistema denominado “Difuse”, con salidas de aire indirectas. El sistema de luz ambiental permite elegir entre más de 64 colores.
Más allá del diseño, nos quedamos con un habitáculo que sigue destacando por el espacio para los pasajeros, lo que mantiene al Tucson como uno de los mejores SUV de su categoría para viajar. Acompaña el espacio para el equipaje, que puede ir desde los poco menos de 600 litros hasta casi 620 litros, en función del motor, por lo que resta el sistema híbrido o el depósito de Adblue en los diésel. En cualquier caso, la capacidad de maletero está por encima de la media de sus rivales.
También destacaríamos el salto en calidad. Ahora, el Tucson sigue perfectamente el camino de los coches que marcaríamos como referencia en esta categoría de precio, en la que se quedan fuera la marcas premium: el Volkswagen Tiguan y el Mazda CX-5.
Aquí puedes ver al Tucson en acción y nuestras primeras impresiones sobre el nuevo Tucson resumidas en un vídeo.
Gama de motores del Hyundai Tucson: gasolina, diésel, híbrido y microhíbrido
Hyundai ofrece hasta seis opciones mecánicas a elegir en el nuevo Tucson. Y hay para todos los gustos y necesidades: dos versiones convencionales con motor de gasolina o diésel y etiqueta C; tres variantes microhíbridas MHEV de 48 voltios con etiqueta ECO, dos de ellas gasolina y un diésel diésel; y un híbrido auto-recargable HEV. Estos son los motores y las potencias, así como las posibilidades de transmisión. Las versiones identificadas como 48V son las Mild Hybrid, con etiqueta ECO.
Gama gasolina:
• 1.6 T-GDI 150 CV: manual 6 vel, 4×2 ó 4×4
• 1.6 T-GDI 150 CV 48V: manual iMT 6 vel, DCT 7 vel, 4×2
• 1.6 T-GDI 180 CV 48V: manual iMT 6 vel 4×2; DCT 7 vel, 4×4
Gama diésel:
• 1.6 CRDi 115 CV: manual 6 vel, 4×2
• 1..6 CRDi 136 CV 48V: manual iMT 6 vel 4×2, DCT 7 vel, 4×2 ó 4×4
HEV: híbrido no enchufable
• 1.6 T-GDI HEV 230 CV: automático 6 vel, 4×2 ó 4×4
PHEV: híbrido enchufable
• 1.6 T-GDI PHEV 260 CV: automático 6 vel, 4×4
En las versiones MHEV de 48V, el cambio manual es el iMT de Hyundai, denominado “inteligente”. Se caracteriza porque tiene un mecanismo que desacopla de forma automática el motor de la transmisión para beneficiar el consumo cuando el coche rueda en modo de marcha por inercia, al levantar el pie del acelerador. La opción automática en los MHEV utiliza el cambio DCT de doble embrague con 7 marchas, mientras que en el Tucson Híbrido y el Tucson Híbrido enchufable es un cambio automático de 6 marchas con convertidor de par. Este último llegará a mediados de 2021.
Salvo las dos versiones sin hibridación, en todos los MHEV y en el Tucson híbrido auto-recargable se puede optar por la tracción delantera o la tracción total HTRAC de Hyundai, con el selector Terrain Mode, que permite elegir entre los modos offroad denominados Mud (Barro), Sand (Arena) o Snow (Nieve).
Equipamiento: más y mejor
Como en los últimos modelos presentados por Hyundai, al Tucson también le llega el sistema multimedia Bluelink, compatible con Apple CarPlay y Android Auto. Ofrece conexión a internet para contar con servicios online en tiempo real (tráfico, aparcamiento, estaciones de servicio y precios…) y se puede conectar el coche al teléfono móvil a través de la aplicación correspondiente.
Otras novedades que no estaban presentes en el anterior Tucson son el airbag central entre los asientos delanteros, el aparcamiento remoto que permite manejar el avance o el retroceso del coche desde fuera para aparcar en batería en sitios estrechos o el control de velocidad de crucero adaptativo que tiene en cuenta las señales de tráfico y la ruta del navegador. La frenada de emergencia ahora también actúa en intersecciones, y la alerta de tráfico cruzado trasero no sólo avisa de que se acerca un coche, sino que también es capaz de actuar sobre los frenos.
Hyundai ofrece cuatro versiones de acabado para el nuevo Tucson. El Kass cuenta de serie con llantas de aleación de 17 pugadas, cámara trasera, climatizador manual, cuatro elevalunas eléctricos, espejos retrovisores plegables eléctricamente, pantalla multimedia de 8 pulgadas con bluetooth y el paquete de asistentes Hyundai Smart Sense.
El acabado Maxx suma las molduras y la parrilla cromada, faros LED, pantalla multimedia de 10,25 pulgadas, barras de techo, climatizador automático, cargador inalámbrico para el smartphone, sensor de parking trasero y sensor de lluvia.
Las vesiones Tecno, que estarán entre las más solicitadas, añaden llantas de 18 pulgadas (19 en el Hybrid), llave inteligente, sistema de audio premium de la marca KRELL, portón del maletero eléctrico, asientos delanteros y traseros calefactados, asistente en intersecciones, carrocería bicolor y asistente de conducción en autopista con control de crucero inteligente (versiones automáticas).
Por último, el Tucson Style es el más lujoso y completo. Aquí todas las versiones tienen llantas de 19 pulgadas, suspensión electrónica, tapicería de cuero, asientos ventilados con reglajes eléctricos, climatizador trizona, techo panorámico, volante calefactado, asistente de aparcamiento remoto (versión Hybrid), asistente de colisión por ángulo muerto y monitor 360 grados.
Precios Hyundai Tucson 2021: con descuento
Hyundai ofrece una campaña promocional sobre los precios de tarifa del nuevo Tucson que descuenta 1.500 euros en las versiones de gasolina, y 2000 euros en los diésel y en el híbrido.
Esto hace que el Tucson 1.6 TGDi 150 CV Klass parta desde los 25.900 euros, y el 1.6 CRDi esté disponible desde 17.000 euros. Con hibridación de 48 voltios, el Tucson TGDi 150 CV, ya con acabado Maxx, parte desde 30.200 euros, y el 1.6 CRDi de 136 CV tiene un precio desde 33.050 euros. En cuanto al Tucson híbrido, lo tienes desde 32.950 euros, también con acabado Maxx.
A estos precios se pueden descontar 1.600 euros adicionales financiando con la marca, y 1.500 euros adicionales con el Plan Renove de Hyundai, al entregar un coche para achatarrar.
Al volante del nuevo Hyundai Tucson
Nada más sentarnos a los mandos del Tucson, al principio la sensación es que todo va a ser un poco más complejo hasta familiarizarnos con los mandos, a pesar de que se han simplificado los botones en favor de las pantallas. O quizás por esto mismo. Pero rápidamente se le coge el “hilo”, todo es más intuitivo de lo que parece en un principio.
La calidad visual se confirma al empezar a tocar y explorar, la visibilidad es muy buena, los asientos resultan muy confortables… Iniciamos la marcha y confirmamos que, según para qué cosas, seguimos preferimos botones físicos a pantallas táctiles. El Tucson ofrece botones para algunas funciones principales fuera de la pantalla; pero a todos los efectos son táctiles, y no capacitivos. Aun así, la pantalla ofrece una muy buena resolución, y el desplazamiento por los menús es rápido e intuitivo. Por debajo de la pantalla central existe una segunda superficie táctil desde la que se maneja la climatización y se puede acceder a alguna funciones del equipo multimedia.
La instrumentación digital cambia los colores y la forma de presentar algunas informaciones en función del modo de conducción, pero no se aproxima a la posibilidades de personalización del virtual cockpit de Audi o del MBUX de Mercedes. Aun así, tiene un sistema que me ha gustado mucho, el Blind View Monitor. Cuando se acciona un intermitente, el reloj del lado correspondiente de la instrumentación se convierte en una pantalla que transmite las imágenes captadas por una cámara de alta resolución en el exterior, para comprobar la posible presencia de un vehículo en el ángulo muerto.
La sensación al volante del Tucson dependerá en gran medida de la opción de suspensión elegida. Existe una más confortable y otra de tarado más firme que mejora la precisión en conducción deportiva pero no resulta en absoluto incómoda, y se puede solicitar que la amortiguación sea de dureza variable.
En cualquier caso, el equilibrio entre estabilidad y confort está muy bien logrado, con una suspensión que filtra muy bien los baches, además de desatacar el aislamiento acústico. Por ello, en carretera o autopista es un coche muy cómodo a la hora de viajar. Y en ciudad o en zonas urbanas se maneja con facilidad, parece más pequeño de lo que realmente es.
Gasolina, diésel… o híbrido
No hemos probado todos los motores disponibles en el lanzamiento, pero sí los suficientes para recomendar pensarse muy bien el uso que se va a hacer del coche antes de decidir la compra. Por ejemplo, el 1.6 TGDi de 150 CV es una opción de entrada a la gama que ofrecen un nivel de dinamismo aceptable, y que puedes considerar si el precio lo más bajo posible es tu principal argumento de compra.
Tengo mis dudas con el 1.6 CRDi de 115 CV hasta que no pueda conducirlo. Por eso, en diésel es muy recomendable fijarse en el 1.6 CRDi de 136 CV, todos ellos con hibridación de 48 voltios. En el 1.6 TGDi, a igualdad de acabado, este sistema supone un sobreprecio de unos 1.500 euros; pero compensa, aunque solo sea por contar con la etiqueta ECO de la DGT. Lo que no tengo tan claro es que, por prestaciones, merezca la pena el 1.6 TGDi de 180 CV. Aunque Hyundai no deja lugar a muchas dudas a la hora de elegir: el más potente solo se ofrece con el acabado superior Style, lo que sube notablemente el precio.
Para un kilometraje anual elevado, con muchos viajes por autopista, el 1.6 CRDi de 136 CV sigue siendo la opción que ofrece el mejor coste por kilómetro, a distancia del 1.6 TGDi, que gasta poco solo si conduces despacio, aunque es claramente más suave y refinado. Compensarás pronto con su menor consumo los 1.500 euros de diferencia que cuesta más el diésel.
Pero Hyundai ha tirado la casa por la ventana con el nuevo Tucson híbrido, y lo ha puesto prácticamente al mismo precio del diésel y, por consiguiente, a poco más de 1.500 euros de diferencia con el gasolina MHEV de 150 CV, teniendo mucha más tecnología.
Una tentación… que se justifica cuando miras las cifras y cuando los conduces. Porque ambos tienen etiqueta ECO, al ser el diésel un microhíbrido. Pero el Tucson híbrido, con casi 100 CV más y un motor eléctrico más potente que no solo suma, sino que puede mover al coche por sí solo a baja velocidad, barre al diésel en prestaciones, refinamiento y agrado de uso. Apunta solo el dato de la aceleración, para hacerte una idea: casi 3,5 segundos más rápido es todo un mundo.