Cuando queremos vender un coche usado, lo más común a día de hoy es anunciarlo en las webs de anuncios clasificados online – plataformas como Milanuncios o coches.net – o en aplicaciones de compra-venta como Wallapop. Lejos quedaron los años en los que abundaban los carteles de «se vende» pegados en los cristales de coches aparcados por la calle, pero aún se ven en ocasiones. Más allá de la facilidad de los clasificados online y el gran público al que alcanzan, no compensa anunciar físicamente la venta de un coche en la calle: puede traerte serios problemas.
Por una parte, entendemos la idea tras los típicos carteles de «Se Vende». Suelen colocarse en coches estacionados en zonas con cierto tránsito de peatones. Su objetivo es obvio, llamar la atención sobre el coche que estamos tratando de vender. Además del precio y un número de teléfono, suelen incluir el kilometraje del vehículo y algún detalle adicional. Información básica, que debe ser contrastada mediante una llamada telefónica. Aunque pueden ser efectivos, su mera presencia puede acarrear multas de hasta 1.000 euros al dueño del coche.
Cómo vender rápidamente un coche de segunda mano
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Escribe un buen anuncio, y publícalo en plataformas de clasificados online
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Multa de hasta 200 euros por circular con un cartel de «Se Vende»
Si no retiras el cartel cuando estás circulando con tu vehículo, te expones a una multa de 200 euros por obstaculizar la correcta visibilidad a través de los vidrios de tu coche. Si el cartel está pegado en cualquier ventanilla, las fuerzas del orden pueden multarte, si a su juicio viola el Artículo 19 del Reglamento General de Circulación:
La superficie acristalada del vehículo deberá permitir, en todo caso, la visibilidad diáfana del conductor sobre toda la vía por la que circule,