Madrid lleva tiempo sufriendo una completa transformación para luchar contra la contaminación y los sucesivos gobiernos municipales han puesto en marcha distintos proyectos para limitar el tráfico de vehículos contaminantes. Todos hemos sido testigos de esas transformaciones y de las luchas políticas que han propiciado estas medidas, pero parece que poco a poco, se va llegando a una solución.
El gobierno municipal de Madrid está trabajando para conseguir que los vehículos más contaminantes queden fuera de la ciudad y comienza un ambicioso plan que quiere llegar a ese momento. Así que desde el consistorio se ha elaborado un proyecto que eliminará del tráfico de la ciudad a todos los coches que no tengan la etiqueta medioambiental de la DGT.
Cinco años para sacar los coches sin etiqueta medioambiental
La propuesta del ayuntamiento de Madríd estará en marcha durante 5 años, así que será en 2025 cuando se consiga que todos los coches sin esta etiqueta medioambiental no puedan acceder a la ciudad, mejorando así las condiciones ambientales. Menos vehículos contaminantes y en consecuencia, menos gases nocivos para la salud en el aire que respiran los madrileños.
Los plazos impuestos por el ayuntamiento son los siguientes:
- 1 de enero de 2022: Los vehículos sin etiqueta medioambiental no podrán circular por el interior de la zona de la M-30, excepto si pertenecen a residentes en la zona.
- 1 de enero de 2023: A partir de ese momento los vehículos sin etiqueta no podrán circular por la propia M-30, a excepción de los vehículos de residentes.
- 1 de enero de 2024: Los vehículos sin etiqueta medioambiental no podrá circular por la ciudad, excepto los vehículos de residentes.
- 1 de enero de 2025: Ya no podrán circular vehículos sin etiqueta medioambiental por Madrid, sean o no de residentes.
Para controlar que los vehículos cumplan con la normativa se ha aprobado un presupuesto de 3,8 millones de euros que estará destinado a la compra e instalación de 100 cámaras de vigilancia que controlarán los vehículos y su antigüedad para comprobar que todos los vehículos cumplen con la normativa y no serán vehículos que intenten saltarse la prohibición de circular por Madrid si carecen de la etiqueta correspondiente.