El mundo de los restomod se popularizó durante los últimos años con el Porsche 911 como coche fetiche. La popularidad de empresas como Singer, Kaege o Gunther Werks se lo debe todo a los Porsche 911 clásicos. Poco a poco, empresas como Eagle, Icon 4×4 o los propios fabricantes de coches – estoy pensando en el Volvo P1800 de Cyan Racing – han llevado los restomods a otro tipo de coches y a otra dimensión. Que un coche sea objeto de un ambicioso restomod es la señal de que ese coche ha «pasado de nivel». Y es lo que le acaba de suceder al Porsche 914.
Aunque a los Porsche 914 siempre se les consideró – injustamente – Porsche «de segunda» a causa de haber sido desarrollados junto a Volkswagen, la espiral de precios del universo Porsche no los ha dejado de lado. Y a esta espiral de precios y aumento de popularidad, ahora se suma su primer restomod. Creado por una empresa llamada Fifteen Eleven Design, no solo busca actualizar su estética interior y exterior, busca llevar su potencial prestacional a otro nivel. Los británicos de Fifteen Eleven estaban, hasta ahora, especializados en restauraciones.
Fifteen Eleven es el taller de restauraciones de la escudería del WRC Mellors Elliot Motorsport. Saben lo que hacen.
Estas restauraciones eran muy ambiciosas en algunos casos, y además, se permitían modificar los vehículos en base a los gustos del cliente. Su proyecto de restomod para el Porsche 914 les llevará al siguiente nivel, y llevará al siguiente nivel al denostado 914. Denostado porque nació con un sencillo bóxer de 1,7 litros y 80 CV en colaboración con Volkswagen. Con todo, el 914 llegó a tener motores bóxer de seis cilindros y hasta 130 CV de potencia. Este roadster biplaza de motor central y peculiar diseño