Ford se introdujo de lleno en el sector de los eléctricos de la mano del Ford Mustang Mach-E, un SUV de grandes dimensiones que mantiene latente la esencia del muscle car. Sin embargo, este paso tan solo ha sido el primero de muchos, y puede que el siguiente se lleve a cabo de la mano del Ford Fiesta. Y es que el segmento de los utilitarios eléctricos está cuajando cada vez mejor, razón de peso para que la firma del óvalo decida atacarlo de la mano del Fiesta.
De momento, Ford no ha hecho declaraciones al respecto, pero se conocen una serie de detalles que podrían ser clave. No debemos olvidar que la firma americana recurrirá a la plataforma modular MEB que utiliza el Grupo Volkswagen para desarrollar coches eléctricos, un aspecto de suma importancia y que podría ser clave.
Y es que la casa alemana gestará una familia vehículos eléctricos bajo el apellido ID., con el que se pretende abarcar diferentes segmentos. Hasta la fecha, el ID.3 y el ID.4 son los únicos representantes de esta nueva división, pero ya sabemos que Volkswagen pretende ampliar el cupo de la mano del supuesto ID.1, un utilitario que llegaría como alternativa eléctrica en el segmento B.
Teniendo en cuenta el fuerte auge de este segmento y que marcas como Peugeot y Opel ya están trabajando en él con opciones eléctricas, no es descabellado considerar que Ford haga lo mismo. El Mustang Mach-E ya se encarga de cubrir la parte más exclusiva del sector, pero ahora la marca americana requiere de un modelo de acceso que contribuya a generar volumen de ventas, papel en el que entrar perfectamente un Fiesta eléctrico.
De ser así, estaríamos hablando de un Ford Fiesta que compartiría infinidad de elementos con ese hipotético Volkswagen ID.1. Además de una estética seguramente basada en el Mustang Mach-E y de un interior más tecnológico también a imagen y semejanza de su hermano mayor, el utilitario eléctrico podría hacer gala de motores con potencias entre 150 y 200 CV y una autonomía máxima de 450 kilómetros.
Está previsto que Ford presente a su segundo coche eléctrico -basado en la plataforma MEB- en el año 2023. Su producción tendrá lugar en Colonia, Alemania, y aunque aún no se sabe si realmente sustituirá al Fiesta, se espera que este nuevo modelo se encargue de establecer una nueva pauta que desboque en más opciones eléctricas que podrían seguir teniendo como punto de partida la plataforma del Grupo Volkswagen.