La primera generación del, primero Citröen DS 4, luego, a secas, DS 4, pasó a la historia por no haber conseguido hacerse un hueco en un mercado donde el tirón de los vehículos compactos empezaba a resentirse, como cualquier otro segmentos, por la moda SUV, una fiebre que se llevó y se sigue llevando por delante berlinas, monovolúmenes y cualquier otra carrocería que no tenga un aspecto relativamente campero.
Quizás, por eso, la segunda camada del modelo, este nuevo DS 4, aparezca bajo tres configuraciones estéticas bien diferenciadas, la estándar (DS 4), la de corte deportivo (DS 4 Performance) y la montaraz (DS 4 Cross).
Para luchar contra el eterno Volkswagen Golf y sus imitadores, para plantar cara al infravalorado KIA XCeed y al resto (de crossovers) y, finalmente, para ofrecer una alternativa a la magistral y exprimida hasta la extenuación fórmula racing del SEAT León FR o la línea deportiva del Ford Focus ST Line, para eso ha sido revivido el concepto DS 4 pero, además, asumiendo su propio carácter, el francés.
Aunque de fabricación alemana, el nuevo DS 4 ofrece una clarísima inspiración en el diseño de la alta costura francesa: elegante, distintiva, exclusiva. Sobre todo en sus detalles, este coche de nuevo cuño presenta «salpicaduras» que hacen del conjunto sublime.
Desde su porte y planta exterior al nivel de refinamiento interior, todo exulta un halo elitista sin precedentes, sobre todo, en este modelo de segunda generación, que aumenta el grado de distinción implementado por la incorporación por tecnologías de último acuñado y materiales de alta calidad y mayor grado sensorial.
En cuanto a la mecánica, DS Automobiles se resiste aún, a pesar de haber anunciado el paso definitivo a la electrificación total, en ofrecer, no solo mecánicas de gasolina sino diésel, y no porque no entedamos que haya motivos suficientes, que los hay y sobrados, para apostar por el gasóleo, sino porque, con la que está cayendo, apostar por una mecánica de gasoil parece ser política y ambientalmente incorrecto ahora mismo.
Todo lo contrario que hacerse con un coche que, aunque sea testimonialmente, apueste por un sistema de apoyo eléctrico como es el caso de los coches de hibridación ligera… Sea como fuere, el DS 4 E-Tense será el híbrido pero enchufable, al menos, con una autonomía capaz de superar, como afirma la marca, el medio centenar de kilómetros como vehículo de cero emisiones directas de dióxido de carbono.
El nuevo DS 4 queda organizado según su esquema motriz de la siguiente forma:
- DS 4 BlueHDi 130, diésel de 131 CV
- DS 4 PureTech 130, gasolina de 131 CV
- DS 4 PureTech 180, gasolina de 181 CV
- DS 4 PureTech 225, gasolina de 224 CV
- DS 4 E-Tense 225, gasolina híbrido enchufable de 224 CV
La comercialización de este coche empezará a principios de verano, entonces conoceremos el precio del DS 4 de 2021.