Al César lo que es del César, y a SEAT lo que es de SEAT. Sí, la firma puede que no tenga demasiado de española en sus mecánicas o puesta a punto, ya que el consorcio germinado por el Grupo Volkswagen a «alemanizado» a todas y cada de sus filiales, pero eso no quita que las siglas de SEAT sigan significando lo mismo que cuando se gestó y que sus integrantes se produzcan en Martorell. Es precisamente por esto que el primer 100% eléctrico de SEAT -que también hará acto de presencia en Volkswagen- se fabricará de manera irrevocable en España tal y como ha confirmado el Gobierno.
Sabemos que el SEAT Mii Electric ocupa dicho puesto, pero fue hace unos meses cuando la firma local anunció que su primer modelo nacido de la plataforma modular MEB llegaría en 2025. En otras palabras, SEAT está amasando el terreno para concebir un coche eléctrico completamente de cero, sin la necesidad de recurrir a un modelo ya existente.
De momento, la casa autóctona mantiene un silencio apabullante al respecto, dejándonos con un mero boceto que adelanta un coche que podrá acogerse a diferentes corrientes en su fase de desarrollo final. Sea como fuere, no estamos hoy aquí para vaticinar los rasgos del eléctrico de SEAT, sino para analizar la decisión de que este modelo de suma importancia para la marca se construirá en territorio español, al igual que el hipotético ID.1 de Volkswagen que tendrá mucho que ver con este nuevo vástago.
Así lo ha confirmado hoy el Gobierno, concretamente la ministra de Industria, Comercio y Turismo Reyes Maroto, quien ha indicado que el eléctrico de Volkswagen se fabricará en Landaben, Pamplona, donde ya se gestan vehículos como el Volkswagen Polo. Dado que se ha hecho oficial dicho acontecimiento, se espera que el homólogo eléctrico por