Fabricado en Vigo, el Peugeot e-Rifter, que es la versión eléctrica de este modelo ya está disponible en los concesionarios desde 29.250 euros, a lo que habría que sumar la posible ayuda a particulares de hasta 7.000 euros de MOVES.
Su batería de iones de litio de 18 módulos cuenta con una capacidad de 50 kWh y un motor de 136 CV / 100 Kw de potencia, lo que le permite disponer de una autonomía de hasta 280 km, según el protocolo de homologación WLTP. Dispone de dos tipos de cargadores integrados que responden a cualquier uso y abarcan todas las soluciones de recarga. Cuenta de serie con un cargador monofásico de 7,4 kW y uno opcional trifásico de 11 kW. La toma de carga, situada en la aleta trasera izquierda, permite la recarga de varias formas: una toma estándar, una toma reforzada, mediante una estación de carga e incluso en un cargador rápido.
La alternativa a los desaparecidos monovolúmenes
El Peugeot e-Rifter está diseñado para ofrecer resistencia y durabilidad incluso en las situaciones más exigentes. Su vocación polivalente se traduce en una gama que permite elegir entre dos longitudes: Standard o Long, así como 5 ó 7 plazas. Todo ello con una modularidad y un espacio interior que le convierten en una alternativa a los monovolúmenes tradicionales.
Su interior, totalmente equiparable al de un monovolumen compacto, es un compendio de modularidad y sentido práctico. Su excepcional volumen de carga, que va desde los 775 litros bajo bandeja de la versión 5 plazas a los 4.000 litros bajo techo con los asientos abatidos en la versión larga, puede aprovecharse plenamente y adaptarse a cualquier necesidad. Incorpora, además, un sinfín de compartimentos amplios y de fácil acceso repartidos por todo el habitáculo. El airbag frontal del pasajero, de tipo «Bag in Roof», está situado en