El Renault Arkana es un SUV compacto de estilo coupé. A día de hoy, no existe un modelo equiparable por precio si tenemos en cuenta su formato. Todas las alternativas actuales son claramente más costosas y tienen un tamaño ligeramente superior; nos referimos al Audi Q3 Sportback, BMW X4 y Mercedes-Benz GLC Coupé.
Exterior: con el estilo que marca la moda
Exteriormente, no cabe duda que parece un coche inspirado en las «alternativas» anteriormente mocionadas. La silueta es muy similar, y el corte de la trasera nos recuerda mucho al GLC Coupé de Mercedes-Benz. Por lo demás, el Arkana no puede ocultar que tiene una clara genética Renault, pues adopta las últimas tendencias de diseño de la marca. En el frontal, me atrevería a decir que los faros con tecnología LED y la parrilla, son los mismos que utiliza el Renault Mégane. En la parte posterior, los grupos ópticos prácticamente son idénticos a los que ofrece un Renault Talisman o un Renault Koleos. Por lo demás, como buen SUV que se precie, no faltan protecciones decorativas en los paragolpes y en los pasos de ruedas. También ofrece elementos decorativos que simulan rejillas de ventilación, tanto en las aletas delanteras como en los paragolpes posteriores. Si optas por el acabado R.S. Line, encontrarás un coche con un estilo aún más deportivo.
El Arkana se lanza en siete colores de carrocería: Blanco (opaco), Blanco Perla, Negro Sport, Gris Tornado, Azul Zanzíbar, Rojo Deseo y Naranja Valencia (exclusivo de la versión R.S. Line). Un techo negro opcional refuerza el aspecto dinámico del vehículo. Salvo el negro Sport, todos los colores son opcionales, y su precio, dependiendo del color y la versión elegida, puede variar entre los 260 y los 727 euros. Además, se ofrecen tres tipos de llanta de 17 y 18 pulgadas. Ambas medidas forman