Resulta habitual que el mundo de la moda y el diseño de vehículos se den la mano con creaciones en las que se mezcla en diseño de ambos mundos, algo que sucede en otras marcas tampoco podía dejarse pasar en Rolls-Royce, quienes se han asociado con la casa de moda francesa Hermès para la creación de un one-off que va a ir a parar al garaje de un afortunado empresario japonés.
Para esta nueva creación exclusiva Rolls-Royce ha utilizado a uno de sus modelos preferidos para estos menesteres, el Phantom, dando como lugar a un one-off que han denominado como Phantom Oribe y que incluye muchos de los deseos de su propietarios. Para comenzar, su carrocería ha sido pintada en dos colores siendo el predominante el Oribe Green, un color que nace exclusivamente para este modelo a partir de los característicos colores verde y crema de los artículos Oribe del que es un entusiasta coleccionista el propietario de este Phantom.
Este color de tan característicos ha sido desarrollado durante meses por los especialistas del fabricante de Goodwood, el cual se combina con una sección inferior en un color blanco crema que recorre los cuatro costados del Phantom Oribe. Esta combinación de colores, como es de esperar, se traslada a un interior en el que los artesanos de Rolls-Royce y de Hermès han trabajado codo con codo de manera que ha conseguido aunar la experiencia y el buen hacer de ambas casas.
El interior del Rolls-Royce Phantom Oribe cuenta con una tapicería en la que predomina el cuero Hermès Enea Green aplicado en elementos como el volante, la palanca de cambios, los controles del climatizador, las manijas, el panel de instrumentos o los distintos pilares, aunque también lo encontraremos en otros elementos que pasan más desapercibidos como la guantera, la consola central o la nevera para el champán. Hermès es famosa por incluir en sus diseños correas y ribetes, algo que este vehículo también encontraremos en los reposacabezas o en las sujeciones laterales de los asientos traseros, que se combinan con detalles en blanco como contraste así como inserciones en madera de nogal aplicadas cuidadosamente en los paneles de las puertas, el salpicadero o la sección central trasera.
A nivel mecánico no encontraremos ninguna sorpresa en este Rolls-Royce Phantom Oribe, por lo que bajo su capó seguiremos encontrando el motor V12 de 6.75 litros capaz de desarrollar un potencia de 571 CV junto con un par motor de 900 Nm, trabajando con una caja de cambios automática de 8 velocidades. El precio de este one-off no ha sido desvelado, pero como imaginaréis solamente está al alcance de muy pocos.
