La DGT está últimamente en boca de todos debido a sus constantes intervenciones en diferentes aspectos legislativos, tales como el nuevo límite de velocidad a 30 km/h. Pero la Dirección General de Tráfico vuelve a convertirse en inequívoco protagonista tras anunciar que, a falta de obtener un comunicado oficial como el que se esperaba en el pasado mes de diciembre, las aclamadas -y en ocasiones dolorosas y desesperantes- etiquetas de la DGT sufrirán importantes cambios en julio. Quédate, porque esto te interesa.
Hasta la fecha, estas etiquetas habían desempeñado la tarea de calificar a los vehículos del panorama español según su tipo de mecánica y bajo la normativa en la que estos se desarrollaron. Sin embargo, desde asociaciones como Ecodes buscan poner fin a esta distribución, en ciertos casos, injusta, y para ello lanzan una propuesta dispuesta a cambiarlo todo.
¿Qué cambiará con las nuevas etiquetas de la DGT?
El primer y más trascendente cambio lo encontramos en que los coches ya no se acogerán a estas etiquetas por tipo de mecánica, sino por emisiones producidas. De esta manera, la etiqueta CERO amparará bajo sus condiciones a vehículos única y exclusivamente eléctricos, es decir, esos que no emanan ni una sola mota de CO2. También cambiará su color, que pasará de azul a verde, y dejará de cubrir a los híbridos enchufables.
Por su parte, la etiqueta ECO desparecerá para convertirse en la etiqueta D y cubrir a vehículos híbridos, híbridos enchufables, bi-fuel -GLP y GNC-, mild-hybrid y gasolina y diésel Euro 5 o Euro 6 y Euro 6d que no superen en ningún caso los 95 g/km de CO2. ¿Con esto qué se consigue? Evitar que vehículos de alta potencia con tecnología micro-híbrida puedan disfrutar injustamente de las ventajas de la que se llamará etiqueta D partir de julio.
La etiqueta C será de