El Land Rover Defender es uno de esos todoterrenos que se han ganado y que podemos catalogar como míticos. Un 4×4 de los de verdad que lleva con nosotros desde 1948 siendo capaz de enfrentarse a los caminos más difíciles.
Es cierto que el nuevo Land Rover Defender ya no es solo un todoterreno de grandes capacidades, sino que también nos ofrece una gran comodidad y lujo para poder viajar o utilizarlo día a día. Es por ello, que Manhart ha decidido aprovechar esta oportunidad y convertir al nuevo Land Rover Defender en una máquina enfocada en el rendimiento por carretera.
El Manhart Defender DP 500 es la propuesta del preparador alemán para todos aquellos que busquen una estética diferenciada y un rendimiento con el que plantar cara a más de un deportivo gracias a sus 512 CV, sin renunciar a la comodidad de su parte más SUV y al lujo al que nos tiene acostumbrados la marca británica aún mejorado por Manhart.
La preparación ha sido montada sobre la versión de carrocería larga “110” a la que se le han equipado varios vinilos en color negro, unos guardabarros más prominentes que le aportan una apariencia mucho más ancha y agresiva y unas enormes llantas forjadas en 24 pulgadas calzadas sobre unos neumáticos 295/40 R24. Manhart también ofrece como posibilidad unas llantas en 22 pulgadas para aquellos que no quieran una llanta tan grande o pretendan sacar del asfalto su DP 500.
El interior es otro de los lugares a los que Manhart ha prestado mucha atención, ya que podemos apreciar una nueva tapicería en Alcantara y cuero con pespuntes diferentes al modelo de serie. Aunque esto no queda aquí, ya que el preparador también ofrece la posibilidad de montar unos asientos ErgoMed de regulación eléctrica firmados por Recaro calefactados y ventilados.
Cifras de V8 gracias a una reprogramación en la centralita
El corazón del DP 500, monta un seis cilindros de 3.0 litros turbo que proviene del Defender P400 AWD y que de serie desarrolla 400 CV y 550 NM de par motor. Una cifra realmente buena pero que Manhart ha querido mejorar llevándolo hasta los 512 CV y a los 710 Nm, unas cifras muy cercanas a la versión V8 de 5.0 litros del Defender que desarrolla 525 CV y 650 Nm.
Para deleitar a cualquier afortunado que pueda escuchar rugir esta máquina, Manhart ha equipado al DP 500 con un sistema de escape de acero inoxidable que estará disponible con salidas de escape recubiertas en carbono o cerámicas.
Para parar los 512 CV, el preparador también ofrece un sistema de frenos mejorado que unido a la suspensión neumática de serie, que le permite rebajar su altura 30 mm hacen que ver este aparato aparcado u en movimiento deba ser una maravilla.