Desde hace unos años a esta parte, las llantas de fibra de carbono se han popularizado de forma exponencial. Uno de los primeros coches en equiparlas fue el Shelby Mustang GT350R, pero también las hemos podido encontrar en coches como el Ford GT o hipercoches como el Koenigsegg Regera. Aunque su coste sigue siendo elevado, se irán poco a poco democratizando. Sin embargo, ese momento aún no ha llegado. La prueba es que es Bentley la marca que presenta su nueva llanta de fibra de carbono de 22 pulgadas, la más grande creada hasta la fecha en la industria.
La llanta ha sido desarrollada por Mulliner, y ha sido específicamente desarrollada para el Bentley Bentayga. El desarrollo de la llanta ha demorado la friolera de cinco años, y se ha convertido en la primera llanta de fibra de carbono en superar las exigentes pruebas de calidad del TÜV alemán. Este organismo ha certificado la seguridad y durabilidad de la llanta, asegurando que en caso de un fuerte impacto – un impacto que rompería la llanta y causaría un fuerte reventón del neumático – su comportamiento es superior a una llanta convencional.
Soporta sin problema las pruebas de estrés biaxial, apriete excesivo de tornillería e inflado excesivo del neumático.
La estructura de fibras superpuestas de la llanta permite que un impacto de gran fuerza provoque un desinflado progresivo del neumático. Bentley afirma que esta llanta es más resistente que una llanta de aluminio forjado, material del que están construidas las llantas de gama alta de la marca británica. Pero el principal motivo para desarrollar y equipar estas llantas en un Bentayga no es solo su resistencia. El principal motivo es que cada llanta es 6 kilos más ligera que su contraparte tradicional, reduciendo las masas no suspendidas del coche.
En un todocamino de