El hidrógeno se ha convertido en el proyecto estrella de las empresas gasistas, eléctricas y petroleras, que intentan atraer fondos estatales para diversificarse y aprovechar el tirón del llamado hidrógeno verde. Pero aún con un futuro incipiente en el transporte por carretera, esta energía deja de tener sentido si los vehículos no tienen donde repostar.
Por eso, desde la patronal automovilística y el sector gasista están pidiendo aumentar dramáticamente el número de hidrogeneras en España. Piden nada menos que 150 para 2025, y cada una cuesta como mínimo un millón de euros.
Hidrogeneras, sí, pero que suministren hidrógeno verde
La Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (ANFAC) y la Asociación de transporte sostenible que integra la cadena de valor del gas y el hidrógeno (Gasnam), han pedido adelantar el objetivo de una red mínima de 150 hidrogeneras en España de 2030 a 2025.
Un objetivo cuanto menos ambicioso, como podemos observar en el mapa del proyecto, puesto que actualmente hay operativas en España cuatro hidrogeneras, según datos proporcionados por el Centro Nacional del Hidrógeno.
Tres de ellas están ubicadas en Puertollano (Ciudad Real), Albacete y Huesca, y suministran hidrógeno a 300 bar, y una más reciente de Toyota en Madrid, a 700 bar (la presión que necesita un vehículo de pasajeros).
En este escenario, las asociaciones asumen que el punto de partida español es más negativo que el de otros países europeos como Alemania o Francia, dado que no contamos con ninguna hidrogenera de acceso público en la actualidad.