El Hennessey Venom F5 es uno de los hiperdeportivos más grandes de todos los tiempos y como todo lo bueno, se hace esperar. La compañía afincada en Texas ya nos anunció que durante los próximos meses comenzaría la producción de estas bestias coincidiendo de esa manera con el 30 aniversario de la compañía, fundada por John Hennessey en 1991 fruto de su pasión por los automóviles.
Ahora, para ponernos la miel en los labios, Hennessey nos ha mostrado las primeras imágenes de su primer modelo personalizado al gusto del consumidor, que para ser sinceros, se ve espectacular.
Precio y exclusividad al mismo nivel
El modelo personalizado es para el empresario Howard Panes, uno de afortunados que podrá contar con una unidad de las 24 unidades que en total se van producir de este hiper exclusivo superdeportivo que tiene un precio de 2,1 millones de dólares.
El exterior esta vestido en un color brillante llamad Blue Arione que recorre prácticamente toda la carrocería salvo algunos partes como su lip delantero, sus faldones, su difusor o sus pinzas de freno en color naranja, una combinación que a los que nos gustan las carreras, nos recuerda mucho a la mítica decoración de Gulf Oil.
Mucha fibra de carbono
El interior cuenta con dos baquets de fibra de carbono -un material que ha sido utilizado en prácticamente todas las molduras de su habitáculo-, revestidos en cuero de color naranja brillante para acompañar a los detalles que ya hemos mencionado de su exterior.
Su volante al más puro estilo Fórmula 1 de fibra de carbono y cuero naranja son la clara muestra de que estamos ante un coche que cuesta unos cuantos millones de dólares con el que habrá que domar a esta bestia de cifras estratosféricas.
Potencia a espuertas
Su corazón es un V8 de 6.6 litros y un doble sistema de turboalimentación que desarrollan unos increíbles 1.817 CV y 1.617 Nm de par motor, que le permitirán hacer el 0 a 100 km/h en menos de 3 segundos y el 0 a 200 km/h en menos de 5 segundos.
Estas increíbles cifras no son capaces solo gracias a esos 1.817 CV, sino a que gracias a su ligero chasis monocasco de fibra de carbono, solo pesa 1.338 Kg, lo que da una relación peso-potencia de 1,35 CV por Kilo. El objetivo de esta bestia es el de superar los 500 km/h, una velocidad más propia de avión de combate que de coche.
