Volvo fue uno de los primeros fabricantes en anunciar que iniciaba el camino para ser neutro en emisiones de CO2. En primer lugar, confirmó que sus modelos dejarían de emplear motorizaciones diésel y gasolina. Poco después anunció su apuesta por la electricidad lanzando al mercado propuestas híbridas e híbridas enchufables. El último paso, junto a su nueva matriz Geely, ha sido dar forma y cobertura técnica a su firma premium eléctrica: Polestar.
Ahora tienen que redefinir su estrategia global de lanzamientos. Tradicionalmente, la firma sueca ha sido una especialista en berlinas y familiares. Sin embargo, ambos segmentos del mercado están de capa caída, por lo que tendrán que apostarlo todo por crear nuevos SUV´s. Y en ello están, con importantes novedades en la pista de salida como la tercera entrega del XC90. No obstante, se le ha adelantado el interesante Volvo Concept Recharge.
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La silueta del Volvo Concept Recharge es más sencilla y fluida, aunque mantiene la luz diurna Thor
Estéticamente hablando, el Volvo Concept Recharge supone un punto de inflexión para la firma. En primer lugar, porque va un paso más allá con la filosofía de diseño «Less but better» que apuesta por eliminar aquellos elementos de diseño innecesarios en un vehículo eléctrico. Esto es posible, porque los futuros modelos eléctricos de la firma no compartirán plataforma ni tecnología con vehículos equipados con motores de combustión interna.
Ahora, gracias a la adopción de una plataforma plana los diseñadores han podido estirar la distancia entre ejes y situar las ruedas en las esquinas. De esta forma, los voladizos serán más cortos, aportando mayor habitabilidad al interior. Todo ello, además, se traduce en una menor altura del techo y del capó, beneficiando a la aerodinámica. Peor no es el único elemento que cambia, ya que pierde la tradicional parrilla para sumar una en forma de