En 1975, Bultaco presenta su modelo Frontera que venía a sustituir a la mítica Bultaco Matador. Sin duda Bultaco hacía motos de primer nivel y esta Frontera, fue parte de la causa por la que la mítica marca del pulgar desapareció. No porque fuera mala o porque no se vendiera, sino todo lo contrario. Bultaco y su Frontera alcanzaron cotas de éxito inimaginables para la marca, tanto que no podían satisfacer todas las necesidades y peticiones, sobre todo provenientes de Europa y Estados Unidos.
En España, los jóvenes soñaban con tener una Bultaco, pero la maltrecha economía del país, hacía que solo unos pocos pudieran contar con una de ellas. La Frontera, es una moto todo terreno, el ancestro de lo que hoy llamaríamos Enduro. Nos adentramos en la mítica leyenda de Bultaco y en uno de sus modelos más curiosos.
Bultaco, la competición como escaparate
En 1958, Don Paco Bultó funda Bultaco en Barcelona, anteriormente Paco Bultó cofundó Montesa, pero abandonó la marca cuando esta dejó la competición. Paco y Enzo Ferrari tienen mucho en común, ambos dos eran animales altamente competitivos y pensaban que era capital estar en la competición. Por un lado, era el mayor de los escaparates tecnológicos y por otro, en palabras de Paco Bultó “las ventas siguen la bandera de cuadros”. Desde Cunit (Tarragona) Bultaco lanzó poco después de fundarse la Tralla que además compitió en la categoría “de serie” en el Gran Premio de España en Montjuic.
Sin duda la frase de Bultó fue certera, tras los buenos resultados de la Bultaco Tralla en esta primera carrera. Por poco gana la Bultaco Tralla, después de la carrera aparecería la Tralla Sport, se puso un carburador más grande, se modificó el escape y otros pequeños cambios más para que tuviera más chicha. Bultaco ha tenido modelos de carretera