No nos cansaremos de decirlo. Hemos de congratularnos por el hecho de que la siniestralidad en carretera, el número de fallecidos en accidentes de tráfico, haya descendido dramáticamente en las últimas décadas. La concienciación y la mejora de la infraestructura ha contribuido pero, sobre todo, la mejora de la seguridad de los automóviles. Pero más allá de la frialdad de las estadísticas, cada fallecido en un accidente de tráfico es un drama familiar y, sobre todo, el reflejo de un drama social.
La Dirección General de Tráfico sigue analizando las causas de la siniestralidad, poniendo especial atención en las distracciones, en la protección de los colectivos vulnerables – peatones, ciclistas y motoristas – y persiguiendo graves irresponsabilidades, como conducir bajo los efectos del alcohol y otras drogas.
Pero el Director General de Tráfico, Pere Navarro, también apunta a la segunda mano, declarando que «no puede ser que haya transferencias y compraventas de vehículos de gran antigüedad».
Pere Navarro: «no puede ser que haya transferencias y compraventas de vehículos de gran antigüedad»
La DGT aboga por la renovación del parque
Estos días se celebraban las Jornadas 3.0 sobre «La Tecnología del Automóvil y la Seguridad Vial» de la plataforma Ponle Freno, organizadas por Fundación AXA y Atres Media, en las que se realizaron diferentes coloquios y mesas redondas en las que participó el propio Pere Navarro.
Y al respecto de la tecnología que está incorporando la industria del automóvil, Navarro quiso hacer hincapié sobre la «necesaria» renovación del parque automovilístico y específicamente sobre el mercado de ocasión:
«También nos interesa renovar para evitar la compraventa de vehículos. No puede ser que haya transferencias y compraventas de vehículos de gran antigüedad»
Pere Navarro, Director General de Tráfico
La DGT advierte del peligro de los coches más antiguos
La Dirección General de Tráfico dirige el punto de mira específicamente hacia una de las