Los conductores mayores de 65 años y los jóvenes suelen ser las franjas generacionales peor vistas; unos por ser considerados torpes y distraídos, otros por temerarios. En cualquier caso, ahí están los datos para desmitificar estas creencias, y un reciente estudio se inclina del lado de la balanza de los jóvenes.
Según datos de Fundación Línea Directa, los jóvenes españoles de 18 a 29 años son el grupo de edad con menor tasa de mortalidad entre los automovilistas (0,5%), un indicador que ha descendido un 41 % en la última década.
Los conductores de 35 a 44 años, los más imprudentes
El estudio «El gran cambio. Jóvenes conductores: anatomía de una nueva generación al volante» analiza la siniestralidad vial de los conductores españoles de 18 a 29 años entre los años 2010 y 2019.
⭕️ Baleares, Cataluña y Madrid destacan por tener este tipo de accidentes ligeramente superior a la media.⭕️ Castilla y León, Navarra y Región de Murcia destacan por registrar un índice de siniestros con jóvenes más bajo que el resto de territorios. #JóvenesySeguridadVial pic.twitter.com/JjjugYRrfq— F Línea Directa (@f_lineadirecta) October 25, 2021
En él se habla de un gran cambio de tendencia: en los últimos 30 años, los siniestros viales han pasado de suponer el 31 % de los fallecimientos de jóvenes (1989) a ser el 17 % (2019).
Además de que los jóvenes españoles de 18 a 29 años son el grupo de edad con menor tasa de mortalidad, de acuerdo a los datos, la evolución de la lesividad también arroja buenos datos para los conductores de 18 a 29 años, ya que el resto de grupos de edad tienen una lesividad grave un 10,6 % superior a la de los automovilistas más jóvenes.