Fue durante los entrenamientos libres del Gran Premio de Francia cuando Lewis Hamilton soltó por su radio una insinuación de que el motor Honda de Red Bull era sospechosamente rápido. Entonces se montó cierto revuelo sobre supuestas irregularidades, pero solo nueve carreras después las tornas han cambiado.
Ahora es Red Bull quien sospecha de la unidad de potencia de Mercedes, la cual es innegable que, legal o ilegalmente, ha dado un paso adelante en los últimos Grandes Premios. Monza, Sochi y Turquía han sido demoledores para Red Bull, pero la FIA de momento no encuentra nada que no se ajuste al reglamento.
El Mercedes está muy por delante del Red Bull en las últimas carreras
Concretamente, Red Bull sospecha que Mercedes está inyectando aire enfriado artificialmente en el compresor, lo cual está aumentando la potencia del propulsor y, también, provocando los problemas de fiabilidad que han obligado al equipo alemán a cambiar el motor entero de Valtteri Bottas y la cámara de combustión de Hamilton.
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Por eso Red Bull ha hecho una consulta a la FIA sobre si eso es legal, ya que ellos intentaron hacerlo en