Tras una pequeña mentirijilla en el nombre, ésta moto de 400cc (no 500 como reza su apellido) esconde mucha clase. Y es que si por algo se caracteriza es porque su diseño inspira a aquellas motos de Steve McQueen que tanto siguen cautivando a famosos actuales como Brad Pitt o David Beckham, estos últimos han ayudado a propagar el look vintage en el mundo motero y por ello han hecho que este tipo de motos «molen mucho».
Esta moto evoca precisamente ese estilo de vida motero que mantiene vivas las tradiciones, que arregla sus máquinas en vez de cambiarlas y que hace que haya un vínculo entre moto y rider. Pero, ¿Mash? puede que muchos no tengan esta relativamente joven marca en el radar. Hagamos un pequeño resumen de esta empresa para llegar a entender ante que estamos.
Historia
Mash se creó en 2012, lo cual la hace una marca joven en comparación con otras que llevan muchas décadas en funcionamiento. Durante estos años han sacado modelos entre 50cc y hasta 650cc y han mejorado cualitativamente con el tiempo, ahora algunos de sus modelos ya tienen inyección electrónica y ABS. Esta empresa es parte de la Société d’Importation de Motos et Accessories (SIMA).
Tal y como su nombre indica, se dedican a la importación, por lo que se importa la moto entera, donde ponen especial interés según ellos es en la elección de los socios extranjeros que se van a encargar de cada pieza. SIMA fue fundada por el francés Marcel Seurat, piloto profesional que de acuerdo con la marca se le atribuye ser el creador del concepto francés conocido a estas alturas en todo el mundo, «super motard».
Mash tiene muchos modelos y dentro de ellos, además, ediciones especiales, por lo que su gama es muy interesante y sus precios, contenidos.
Las «Five Hundred»
Esta gama