Mediante carta, la Dirección General de Tráfico está recordando a miles de conductores en nuestro país que sus coches están obligados a volver a pasar la Inspección Técnica de Vehículos (ITV) si han sido declarados siniestro total tras un accidente y aun así decidieron repararlos. Incluso si el plazo para su próxima inspección aún no ha vencido.
Si el coche no supera la inspección, su propietario deberá reparar todo lo que sea necesario para poder volver a circular legalmente y salir apto en los plazos estipulados para ello. De no ser así, el coche no podrá circular y el dueño se expondrá a multas de entre 200 y 500 euros.
De qué depende la cuantía de las multas
La cuantía de la multa dependerá de las razones por las que el vehículo no haya superado la inspección. Así, en caso de que la ITV se considere desfavorable porque se hayan encontrado defectos graves en el vehículo, el propietario tendrá un plazo máximo de dos meses para repararlos y volver al someterse a la ITV. Además, sólo tendrá permitido desplazarse hasta el taller y al lugar de la inspección.
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Quién puede pasar la ITV por ti
Si esto se incumple (aunque en ocasiones será difícil de probar o será