El coche eléctrico se está convirtiendo, legislativa y comercialmente, en la opción plausible para todo aquel que se plantee la adquisición hoy en día de un vehículo nuevo. No obstante, el escepticismo recae sobre esta movilidad sin demasiados eufemismos, y más después de conocer casos como el del Volkswagen ID.3 y la degradación de batería a la que se había expuesto por abusar de la carga rápida. Sin embargo, ante casos como estos existe lo que se conoce como garantía de los coches eléctricos, cuyo funcionamiento se adapta a la condición mecánica de este tipo de vehículos y que, por ende, muestra algunas diferencias. Vamos descubrir, por lo tanto, qué cubre la garantía de los eléctricos y durante cuántos kilómetros.
Y es que, al fin de cuentas, queremos tener las espaldas bien cubiertas a la hora de enfrascarnos en la aventura de adquirir un nuevo coche, sobre todo si este ofrece una mecánica nueva para nosotros. Es por ello que, ante la posibilidad de comprar un coche eléctrico, es necesario saber que ofrecen las diferentes marcas con sus garantías en caso de que algo falle.
Pero, ¿qué implica la garantía de un coche de combustión?
Por norma general, la garantía de cualquier coche cubre cierto tipo de problemas durante un número determinado de años o de kilómetros, y en ciertas ocasiones lo que ocurra antes. Vamos a profundizar con el ejemplo de un coche de gasolina como el Volkswagen Golf, cuya presencia en el mercado está más que asentada desde hace tiempo, y así poder conocer las diferencias con la garantía de un coche eléctrico.
En este caso, el compacto cuenta de serie con una garantía oficial de dos años y 160.000 kilómetros, lo que suceda antes. Durante este periodo de tiempo -o kilometraje-, la marca asumirá cualquier inconveniente mecánico que surja siempre y cuando no sea