El BMW Serie 8, nació en el año 2019 presentándose como una de las opciones más atractivas de su segmento presumiendo de una dinámica increíble, un diseño realmente sublime y un apartado tanto tecnológico como mecánico, realmente versátil y avanzado.
Tras estos tres años y medio en el mercado, BMW ha decidido darle una pequeña renovación con el fin de reforzar sus ventas en el mercado, incorporando nuevas novedades en su diseño, apartado dinámico y en su interior, dónde se estrena una nueva pantalla para el sistema de infoentretenimiento de mayor tamaño.
Sus novedades de diseño
Comenzando con lo relativo a su diseño, BMW ha querido renovar a sus BMW Serie 8 Coupe, Serie 8 Gran Coupé y Serie 8 Cabrio con el paquete M Sport de diseño, ahora de serie en todas sus variantes. Además, la marca bávara también estrena en el modelo la nueva parrilla BMW “Iconic Glow” iluminada, mejorando aún más su presencia.
Recordemos, que el mencionado paquete M Sport suma unas llantas de aleación ligera M de 19 pulgadas, el sistema de frenos M Sport y el diferencial M Sport de serie para las versiones V8 y equipable como opcional para las variantes de 6 cilindros si se equipa el paquete M Sport Pro.
El listado de personalización, también recibe unas nuevas llantas de aleación ligera M Performance de 20 pulgadas y cuatro nuevos colores para su carrocería: Skyscraper Grey metalizado, San Remo Green metalizado, Portimao Blue metalizado y BMW Individual Frozen Tanzanite Blue metalizado.
Estos nuevos colores, pueden hacer una gran combinación con las nuevas molduras exteriores en negro brillo, sus pinzas de freno negras, los faros M en negro Shadow Line o con el bonito y sutil spoiler trasero M que le confiere una apariencia más deportiva, algo a lo que también contribuyen los nuevos emblemas opcionales BMW 50 Aniversario en su capó, portón trasero y bujes de las llantas.
Un apartado tecnológico mejorado
De puertas para dentro, los nuevos Serie 8 reciben como gran novedad, la nueva pantalla de infoentretenimiento del BMW Live Cockpit Profesional de serie, que pasa de 10,25 pulgadas a 12,3 pulgadas. También se suma a su equipamiento de base, un nuevo volante M Sport forrado en cuero y unos asientos multifunción con ajuste eléctrico y apoyo lumbar.
Sus opciones mecánicas
En cuanto a su oferta mecánica, los nuevos Serie 8 mantienen las mismas motorizaciones que ya conocíamos, que consiste en dos motores de gasolina y una diésel con microhibridación.
La versión menos potente, la compone un motor gasolina de seis cilindros en línea de 3.0 litros que desarrolla 333 CV de potencia y 500 Nm de par máximo transmitido al eje trasero. Este motor, lo equipan los BMW 840i y BMW 840i xDrive.
Por encima de este propulsor, se encuentra el motor gasolina de ocho cilindros en V de 4.4 litros que desarrolla 530 CV y 750 Nm de par, asociado a una transmisión automática Steptronic de ocho velocidades y a un sistema de tracción total BMW xDrive. Dicha configuración la montan los BMW M850i xDrive.
Por último, el motor diésel es un propulsor de seis cilindros en línea y 3.0 litros, acompañado de un sistema de hibridación de 48V desarrollando 340 CV de potencia y 700 Nm de par máximo. Todo ello asociado a una caja de cambios Steptronic de ocho velocidades y a un sistema de tracción total BMW xDrive. Esta versión es el BMW 840d xDrive.