Al igual que para otras factorías españolas, 2021 fue un año gris para Ford Almussafes y no solo por la omnipresente crisis de semiconductores.
En los últimos meses del año la factoría entró en situación crítica, ya que Ford se encuentra rediseñando su estrategia en Europa y apuesta por fabricar menos modelos y centrarse en los híbridos y eléctricos pero Almussafes aún no tiene ninguno asignado.
Tras las últimas tensiones entre la dirección de la factoría y sus trabajadores, hay avances encaminados a lograrlo.
Sueldos revisados y menos descansos
Tras la última reunión entre los trabajadores y la dirección de la fábrica valenciana, Ford Almussafes se ha comprometido a actualizar los salarios de su plantilla con efecto retroactivo a 1 de enero de 2021 (después de abonar el incremento del IPC de 2021) y, en principio, se verán incrementados en un 7 % cuando la primera intención de la compañía era rebajarlos para ser más competitivos frente a la factoría alemana de Saarlouis.
Tras esta primera buena nueva para los trabajadores, que llevan luchando meses para no ver recortadas sus nóminas y evitar nuevos ERTEs, las próximas negociaciones girarán en torno a perfilar el nuevo convenio laboral para este año y no parece que vayan a ser fáciles.
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