No es lo mismo un coche eléctrico, que un coche electrificado, y es por eso que el Audi RS Q e-tron que conduce Carlos Sainz en el Dakar 2022 hay que conocerlo en detalle para entenderlo y saber qué es lo que representa realmente en el mundo del automóvil y la competición. Los motores eléctricos son el futuro dentro y fuera de las calles, sin embargo el gran desafío sigue estando en cómo almacenar la energía que requieren para funcionar, y es ahí donde entra en escena la particular receta de Audi para crear un coche eléctrico, un eléctrico cuya energía también proviene de la gasolina.
El Dakar 2022 ha estrenado como gran novedad la categoría T1-Ultimate, o lo que es lo mismo, una nueva categoría diseñada para experimentar con nuevos sistemas de propulsión. Audi ha sido el primer fabricante en apostar por esta categoría, y dentro de las muchas opciones posibles para crear un coche bajo esta clase, la marca alemana decidió confiar en un sistema de propulsión eléctrico a baterías, aunque apoyado por un motor gasolina a modo de generador para conseguir tener el alcance suficiente para completar cada etapa del rally-raid.
Ver la galería completa en Diariomotor
¿Cómo funciona el Audi del Dakar en detalle?
Por lo tanto, la propulsión del RS Q e-tron es totalmente eléctrica, sin embargo el grueso de su energía proviene de la quema de gasolina, de ahí que el hablar de este coche como eléctrico «a secas» no sea correcto del todo. Audi Sport ha creado un buggy en donde se han instalado 2 motores eléctricos – uno por eje – capaces de desarrollar una potencia máxima de 288 kW o 386 CV (aunque sin limitaciones podrían llegar a los 500 kW o 670 CV). Estos motores son los mismos empleados por Audi en la Fórmula