La Yamaha T7 ha sido y es un claro ejemplo de cómo tiene que ser una moto Trail si estamos enfocados al offroad. Y esa clara orientación campera le ha valido a la marca nipona un exitazo. Pero al ser tan offroadera, la Ténéré se queda algo escasa de cara los viajes más largos tanto de campo como de carretera o mixtos.
A nivel dinámico es una pasada, pero se queda un poco corta en autonomía y protección aerodinámica, así como en cuanto a tecnología y modos de conducción. La World Raid es básicamente la solución a esos problemas. (Problemas según cómo se mire claro)
Tenemos claro que Yamaha ya tiene cautivados los corazones de muchos traileros enfocados al offroad puro, esos que hacen uso del asfalto a modo de enlace hasta la zona de campo. Pero le faltaba algo para los que también les gusta hacerse 3.000Km por los Alpes en verano, o bajar a marruecos 10 días en Semana Santa.
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Lo que Yamaha ha hecho con esta nueva versión es simple y llanamente, atajar de raíz esos temas que comentábamos antes. Ahora, esta nueva hermana de la familia T7 viene equipada con un depósito doble que suma su capacidad hasta los 23 litros, haciendo que la autonomía aumente considerablemente llegando a poder disfrutar de la ausencia de gasolineras en tiradas de hasta 500Km. Evidentemente esto siempre depende del uso que se le dé, es probable que en campo esa cifra se reduzca así como aumentará a velocidades responsables en autovía.
A nivel ergonómico, Yamaha ha hecho algunos retoques que mejoran la posición de conducción tanto de pie como sentado. Detalle importante es que el asiento es plano y está dividido en dos piezas, por lo que se puede llevar la moto con el asiento del