El mercado español de vehículos de ocasión seguirá padeciendo los efectos de la actual crisis al menos un año más. Así lo recogen las previsiones de la consultora MSI para para la Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos (GANVAM)
Según este análisis, las ventas de este tipo de vehículo caerán en 2022, cerrando el ejercicio en aproximadamente 1,95 millones de unidades vendidas. Este dato supone un 2,1 % menos que en el año anterior.
Entre las causas, la principal sigue siendo la crisis de los microchips. Y es que, ante una fabricación de automóviles nuevos constantemente interrumpida por la falta de estos semiconductores (así como por la actual situación de conflicto entre Rusia y Ucrania), los compradores están optando mayoritariamente por los usados con menos de cinco años de antigüedad.
Hacia una reducción del parque móvil
Ahora, se prevé que los vehículos en este segmento de edad vean reducidas sus ventas en aproximadamente un 8,6 % dado que su stock está desapareciendo a marchas forzadas.
Y es que, además de los compradores particulares, estos vehículos se habían convertido en una tabla de salvación para muchas empresas, quienes los están aprovechando para renovar sus flotas.
En suma la situación está causando un efecto en cascada dado que, al no haber suficientes vehículos con menos de cinco años, el grueso de la demanda se trasladará al siguiente grupo de edad, formado por los vehículos con menos de diez años. Según MSI, protagonizarán más de un 60 % de las operaciones de venta que se firmen en 2022.
Las previsiones preocupan a