La producción de vehículos ha cerrado 2021 con una significativa caída del -7,5%, con un total de 2.098.133 unidades. La crisis de los microchips, junto con el contexto de crisis económica derivada de la pandemia, ha provocado que, durante el último año se hayan registrado unos niveles de producción de vehículos incluso inferiores a los obtenidos en 2020, un periodo ya de por sí muy negativo por los cierres de fábricas durante dos meses. Si comparamos con el último año prepandémico (2019), cuando la producción cerró con 2.822.360 unidades, la fabricación de vehículos se ha reducido en 724.000 vehículos, un 25,6%.
La crisis de los microchips ha sido el principal condicionante de la contracción de la producción respecto a los años anteriores. Una situación de falta de aprovisionamiento que ha determinado que, a lo largo de todo 2021, los ritmos de fabricación se hayan reducido tanto en los centros de producción en España como los ubicados en Europa, como es el caso de Alemania (principal productor en Europa) con una caída del -11,7% para 2021 o de Reino Unido (-6,1%) o Italia (-1,5%) con los datos acumulados hasta noviembre, Solamente, en el último mes de diciembre del año, las fábricas españolas han reducido una cuarta parte de lo producido en comparación con diciembre de 2020, alcanzando las 147.404 unidades, un -25,1% menos. Las estimaciones marcan que esta situación de escasez irá mejorando durante 2022 pero no estará completamente regulada hasta inicios de 2023.
Este recorte de fabricación supone que, según las estimaciones realizadas en ANFAC, en 2021 se trabajaron alrededor de 44 millones de horas menos que en un año precovid, situación que el sector ha podido gestionar coyunturalmente aplicando medidas de flexibilidad.
Por tipo de vehículo, durante el mes de diciembre, en comparación con el mismo mes de 2020, la fabricación de