Los datos del accidente que sufrió Mick Schumacher en el pasado Gran Premio de Arabia Saudí son de los que asustan. El hijo del mítico Michael Schumacher impactó contra las barreras durante la sesión de clasificación del sábado, teniendo los entrenamientos detenidos durante casi una angustiosa hora.
Según el informe de la Fórmula 1, Mick Schumacher alcanzó los 33 G en su impacto. Es decir, lo equivalente a soportar el peso de 26 toneladas. Un golpe que inmediatamente obligó a su traslado al hospital y a que se perdiese la carrera del domingo, en la que solo estuvo en calidad de invitado.
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El golpe de Schumacher le dejó aturdido, pero en ningún momento perdió el conocimiento. Lo que hizo cundir el pánico es que la radio del coche se chafó con el impacto, así que desde el muro de Haas no recibían comunicación por parte del piloto. Pero otros corredores que pasaron a su lado verificaron que estaba bien.
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