Rivian ofrece dos modelos eléctricos que son muy esperados por los compradores. Es fácil que hayas oído hablar de ellos e incluso te hayas sentido atraído por su diseño, prestaciones y su precio. Pero el Rivian R1S, un pick-up eléctrico, y el Rivian R1T, un SUV eléctrico. Ambos están ya a punto de ver como las primeras unidades salen hacia el garaje de los compradores, pero hay algo que ha empañado el lanzamiento y que ha hecho enfurecer a los que reservaron cualquiera de los dos modelos.
La compañía ha aplicado un incremento de precio considerable de los modelos con cuatro motores de ambos modelos. Las versiones que, casualmente, son las únicas que están siendo producidas. El aumento del precio es de 12.000 dólares en el caso del Rivian R1S y en el caso del Rivian R1T el incremento llega a los 14.500 dólares.
De este aumento solo se salvan las unidades que ya han sido producidas o que están en proceso durante estas semanas y serán las primeras en ser entregadas. La fecha de corte no se ha hecho pública, pero los compradores que tienen su unidad en espera van a recibir un correo en el que se les indicarán las nuevas condiciones. En ese momento, tendrán dos opciones. O aceptan el incremento o renuncian a la reserva.
El precio definitivo, al menos por ahora, el Rivian R1S asciende a 84.500 dólares y el Rivian R1T alcanza los 79.500 dólares. Pero el aumento de precio no se acaba aquí. La batería opcional Max también ha incrementado su precio. Esta batería consigue aumentar la autonomía de 505 a 644 kilómetros, pero estaba previsto que su precio sería de 10.000 dólares. Su precio actual es de 16.000 dólares, así que el precio sube todavía más.
¿Qué hay detrás de Rivian? La marca ha publicado un vídeo en el que cuenta toda si historia. ¡Dale al play!
Además, esta batería solo está disponible para el R1T, lo que hace imposible a los usuarios del R1S acceder a ella. Los precios que ofrecía la marca se hicieron públicos hace varios años, así que el aumento se entiende por todo lo que ha ocurrido durante los últimos años, que han encarecido el proceso de producción. Aún así, el incremento ha sido muy elevado y por sorpresa.
La compañía ha anunciado que habrá versiones más asequibles, con dos motores. Pero pese a que los precios son públicos y están por debajo de los anunciados para el tope de gama, también pueden experimentar cambios al alza. Falta saber qué ocurrirá cuando comience la producción de estas variantes y se trabaje con costes reales. Mientras, los que reservaron su pick-up o su SUV hace unos meses están pensando en cancelar su pedido, con las consecuencias que podría tener esto para la marca.