La supervivencia de SsangYong vuelve a estar en la cuerda floja después que la venta del fabricante surcoreano al grupo Edison Motors no se haya finalmente llevado a cabo. Y es que, según informan desde Coree del Sur, Edison Motors no habría pagado a tiempo el importe acordado.
A principios de este año, los administradores judiciales coreanos dieron el visto bueno a Edison Motors para adquirir SsangYong por un total de 249,1 millones de dólares (224 millones de euros). Edison pagó inicialmente el 10% de la adquisición, pero no pagó los 204 millones de euros restantes antes de la fecha límite del 25 de marzo.
«El contrato se canceló automáticamente porque el consorcio liderado por Edison no pagó el resto de la adquiición cinco días hábiles antes de la fecha de la junta de acreedores (el 1 de abril)», dijo SsangYong.
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Ambiciones desmesuradas por parte de Edison Motors
El acuerdo de adquisición se produjo tras un largo periodo de problemas financieros para Ssangyong. El accionista mayoritario, Mahindra & Mahindra, llevaba intentando vender su participación del 75% desde junio de 2020, tras haber explicado que dejaba de invertir en el fabricante, es decir,