Los coches eléctricos, y en menor medida los híbridos enchufables, suelen ofrecer una capacidad de remolque inferior a los coches con motor de combustión, o incluso ni siquiera estar homologados para remolcar. Y la razón principal no es de índole técnico, sino que tiene que ver con el punto más delicado de los coches de propulsión eléctrica: la autonomía. Se estima que los kilómetros que un coche eléctrico puede realizar con una sola carga se pueden reducir a la mitad si se circula con una caravana enganchada. Y hasta que no se han ido incorporando en los coches eléctricos sofisticados sistemas de gestión térmica, también se temía por la integridad del motor y de las baterías ante el esfuerzo extra que supone circular arrastrando una caravana.
Conducir con remolque puede solucionar los problemas por falta de espacio en el coche como facilitar el transporte de mercancía, caravanas u otros vehículos
Más capacidad de remolque y menor tiempo de recarga
En el caso del Ford Mustang Mach-E, la marca acaba de anunciar que aumenta la capacidad de remolque con freno hasta los 1.000 kg en las versiones equipadas con la batería de autonomía extendida, tanto para los modelos con tracción trasera como en los de tracción total. Con esta mejora, los usuarios de un Mustang Mach-E pueden, por ejemplo, remolcar un barco de tamaño pequeño o medio, algo que antes no era posible.
Hasta ahora, la capacidad de remolque anunciada era de 750 kg. Aun así, el Mustang Mach-E sigue quedando muy lejos de los SUV eléctricos con mayor capacidad de remolque del mercado, entre los que dominan el BMW iX con sus 2.500 kg, o el Tesla Model X con más de 2.600 kg de peso máximo remolcable. Ya son varios los que alcanzan los 1.800 kg, como el Audi e-tron, los Mercedes EQA y EQC o el Volvo XC40 Recharge.
Otras mejoras incluidas en la actualización que anuncia Ford para el Mustang Mach-E incluyen la reducción del tiempo de carga de 52 a 15 minutos para pasar del 80% al 90% de capacidad, así como una recalibración del la función de conducción con un solo pedal, que permite utilizar el acelerador para controlar la intensidad de la frenada regenerativa y hacer un menor uso de los frenos.