SEAT vuelve a la senda de los beneficios, al menos en este primer trimestre del año. Entre enero y marzo de 2022, la filial del grupo Volkswagen consiguió un resultado positivo de cinco millones de euros.
La marca explica esta mejora por una “optimización” de las ventas y los costes fijos, a pesar de la crisis de suministros. SEAT habría así compensado la caída de las ventas y el encarecimiento de las materias primas.
Este tímido resultado positivo, obtenido gracias a una mayor eficiencia económica no puede esconder la realidad. Las ventas de SEAT han bajado notablemente.
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SEAT vendió un 31,8 % menos de coches (entregó 107.000 unidades) este primer trimestre con respecto al mismo periodo de 2021, momento en el que había vendido 157.000 unidades. Al mismo tiempo, sus ingresos por ventas se redujeron un 15,6%, hasta los 2.404 millones de euros.
Parte del resultado positivo, explican desde el grupo Volkswagen, se debe a la apuesta del grupo por los modelos de mayor valor añadido. Es algo que todos los fabricantes intentan y que en SEAT han logrado gracias a CUPRA, una estrategia ideada en su día