Es oficial, Elon Musk ya no está interesado en hacerse con Twitter. Este fin de semana, el CEO de Tesla ha transmitido a la Comisión del Mercado de Valores de EEUU que cancelaba definitivamente su operación de compra sobre la conocida red social.
En el escrito presentado por sus abogados ante la autoridad bursátil estadounidense, Musk justifica su retirada alegando que la compañía tecnológica no estaba cumpliendo con algunos puntos del acuerdo de adquisición, como aportar la información sobre la cantidad de cuentas falsas y bots publicitarios que se mantienen en activo.
The Twitter Board is committed to closing the transaction on the price and terms agreed upon with Mr. Musk and plans to pursue legal action to enforce the merger agreement. We are confident we will prevail in the Delaware Court of Chancery.— Bret Taylor (@btaylor) July 8, 2022
La noticia no ha sido del agrado de los responsables de Twitter, quienes anuncian que tomarán medidas legales para obligar al multimillonario a cumplir con su palabra y abonar los 44.000 millones de dólares acordados entre ambas partes.
Sólo dos salidas: pagar… o pagar aún más
La compra de Twitter por parte de Elon Musk comenzó a fraguarse a principios de abril cuando este último consiguió convertirse en el accionista mayoritario de la compañía. Apenas dos semanas después, la red del pájaro azul ya tenía encima de la mesa la cuantiosa oferta que finalmente aceptaría.