Hace tan solo un par de meses estuvimos probando el nuevo Volkswagen T-Roc 2022, aunque con su acabado de acceso y mecánica más sencillita, la 1.0 TSI de 110 CV. Sin embargo, es hoy cuando vamos a estar a los mandos de todo un lobo con piel de cordero, el T-Roc R de 300 CV, el más deportivo y potente.
El restyling del T-Roc R llega con ligeros cambios que lo hacen más agresivo y actualizado, pero no hay unas diferencias súper notables. Su propulsor es un motor 2.0 TSI de 300 CV y 400 Nm de par, caja de cambios DSG y tracción total 4Motion. En añadido, nuestra unidad equipaba el escape opcional firmado por Akrapovic, así que mal no suena.
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Un aspecto muy discreto y poco diferencial
Este tema es algo muy personal, a mí me gustan que los coches con un carácter deportivo lo transmitan en su diseño, algo que este T-Roc R no termina de hacer. Tiene un diseño que es muy discreto, pasa desapercibido y no parece que sea capaz de hacer el 0 a 100 en tan solo 4,9 segundos, aunque a muchos de vosotros os gusta que no llame tanto la atención.
En el frontal encontramos un aspecto idéntico al que podríamos ver en el acabado R-Line, mismo parachoques, entradas de aire o incluso ópticas. Estos faros opcionales son tipo matriciales, denominados «IQ Light«, y quedan unidos entre sí por una franja que se ilumina. Luego, en el parachoques, encontramos detalles en color negro para así hacer contraste.
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Continuando hacia la vista lateral, resalta principalmente sus llantas opcionales de 19 pulgadas, ya que de serie son de 18. Estas tienen unas medidas de 235 en perfil 35 y entre ellas se pueden observar los grandes frenos con la pinza en color azul y