Todo el mundo sabe que los motores V8 están en peligro de extinción. Modelos de la talla del Dodge Challenger se preparan para despedirse de ellos, de la misma forma que el nuevo Mercedes-AMG C 63 S dice adiós a este tipo de mecánicas para apostar por un conjunto híbrido enchufable de cuatro cilindros.
Por eso llama la atención que sea Mercedes-Benz quien diga que a los V8 todavía les queda cuerda, al menos tanta como sus clientes digan, siempre y cuando los permitan las regulaciones de emisiones.
Sin fecha de caducidad, de momento
El V8 atmosférico del Mercedes-Benz C63 AMG (W203) es una leyenda
Sin duda, la marca de la estrella es uno de los fabricantes que más se está implicando en la electrificación. Su gama está formada por numerosas alternativas micro híbridas, híbridas enchufables y completamente eléctricas, incluso si hablamos de la familia de la familia Mercedes-AMG.
En Motorpasión
Mercedes-AMG Black Series: la saga de seis bestias negras que suma más de 3.400 CV
La división deportiva de la compañía alemana también ha abrazado la electrificación y, además de tener modelos de cero emisiones, como el EQE y el