Los mejores coches para empezar a conducir deben reunir una serie de características que los hacen idóneos. Por ejemplo, debería ser un coche con una limitada potencia, con dimensiones compactas, y que sea manejable. Todo esto son características indispensables para un coche para un principiante, a la vez que sea barato y el mantenimiento también lo sea, por si hay percances. Una vez que te sientas cómodo al volante, conducir puede ser tan fácil como correr o caminar, aunque seas un conductor novato…
Coches de pequeño tamaño
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En el caso de un iniciado, el tamaño importa. Por ese motivo es mejor seleccionar siempre coches que sean compactos, nada de berlinas, familiares o monovolúmenes. La razón es sencilla, se busca funcionalidad y que sea fácil de manejar y aparcar, especialmente si vives en una ciudad donde el aparcamiento es un problema. Y no solo eso, a la hora de la maniobra de aparcamiento, un conductor novato agradecerá que la longitud del vehículo no sea demasiada.
Por este motivo, lo mejor es acudir al segmento B y C de vehículos. Sí que hay que tener en cuenta algo, y es evitar el segmento A. Pese a que son compactos, son más inseguros. Lo mismo ocurre con los cuadriciclos pesados como el Yoyo, que también son inseguros y no los recomendamos desde AM.
Coches baratos
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En el mercado existen gran cantidad de coches baratos que puedes comprar nuevos, y muchos más de segunda mano. Por ejemplo, para empezar, algunas marcas recomendadas son Seat, Opel, Skoda, Ford, Renault o Cintroën. Siempre tienes que evitar otras marcas mucho más caras y complicadas de mantener a nivel económico, como pueden ser Audi, BMW, Mini, Mercedes, VW, etc., por muy compacto que sea el modelo. Te en cuenta que los conductores que comienzan tienden a arañar las