En el año 2017, el Porsche 911 Carrera T volvió al catálogo de la marca alemana para convertirse en la opción básica de la gama, pero con un toque más deportivo y purista, recogiendo el testigo del Porsche 911 T de 1968.
Cinco años después, los de Stuttgart apuestan por la misma fórmula con la generación actual del nueveonce. El objetivo es ofrecer una alternativa más radical de la versión de acceso a la gama gracias a una puesta a punto más deportiva, un peso más ligero y un equipamiento específico.
El equilibrio entre purismo y sencillez
En el mundo Porsche, una simple letra puede significar mucho. Es el caso de la T, que ligada al apellido de cualquier modelo de la marca de Stuttgart es sinónimo de purismo y diversión al volante, más de lo habitual en un Porsche.
En Motorpasión
Probamos el mítico Porsche 911 Carrera RS 2.7: así de adictivo es el ‘cola de pato’, la leyenda que cambió para siempre a los 911
El primer miembro de la familia T, que significa Touring, fue el Porsche 911 de primera generación y hubo que esperar casi medio siglo, hasta el año 2017, para volver a ver este nombre en un coche de la marca, concretamente en el