Que nuestro coche o vehículo tenga los neumáticos en correcto estado es vital, pues son el punto de contacto entre el automóvil y la carretera. Y más en invierno, con la llegada del frío y las lluvias, condiciones que afectan al firme y que exigen aún más a las ruedas.
Por ello que estén en las condiciones adecuadas para circular está en la agenda de vigilancia de la DGT: si lo incumplimos nos pueden multar. Y asimismo, se trata de uno de los elementos que se revisan en la ITV: si no cumplen ciertos parámetros supondrá un resultado desfavorable.
En Motorpasión
Cómo cuidar los neumáticos en invierno para evitar riesgos conduciendo con frío, agua o nieve
Cómo saber si los neumáticos del coche no son susceptibles de multa
Hay determinados aspectos de los neumáticos que debemos comprobar periódicamente, y en especial en los cambios de estación, para saber si ha llegado el momento de cambiarlos o no. Los repasamos.
Profundidad adecuada. Unos neumáticos más desgastados de la cuenta pueden ser muy peligrosos: si los surcos no tienen la profundidad suficiente, no evacuarán correctamente el agua del firme, lo que incrementa el riesgo de aquaplaning.
Lo ideal, y que recomienda la DGT, es que se sustituyan cuando los surcos están en torno