¿Quién no se ha leído la obra de teatro «Las bicicletas son para el verano» de Fernando Fernán Gómez? Vio la luz del día en el año 1977 y aunque su argumento poco tiene que ver con la historia del Mini Cabrio Seaside Edition hay algún dato o paralelismo que los une. Sí, porque ¿Quién dice que los cabrio y descapotables no son para el invierno? Cierto, puede ser que circular sin techo a 5 o 10 grados centígrados no es agradable, pero también tiene su «puntito».
De hecho, aprovechando esta época invernal la casa de Oxofrd lanza al mercado esta edición especial. Y lo es no solo porque con él quieran dar un empujón a sus entregas, sino también por el hecho de que se cumplen 30 años del primer Mini Cabrio. Con todo, podrás observar que su estética cambia poco respecto al resto de versiones que hay en la gama. No obstante, aporta ciertos toques de diseño propios que le dan personalidad. Toma nota de ello.
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El Mini Cabrio Seaside Edition se basa en la versión Cooper S y su oferta mecánica contempla dos opciones en gasolina…
Partiendo de la terminación Cooper S su carrocería puede vestirse en los tonos Caribbean Aqua o Nanuq White. Como complemento luce unas llantas de aleación de 18 pulgadas en acabado bitono y diseño de siete radios con secciones recortadas y pulidas. Para distinguir ante qué versión estamos, en el guardabarros y el portón va el logo «Seaside» acabado en el mismo tono de la carrocería. Amén de unas franjas blancas dobles en las puertas.
De puertas adentro las novedades del Mini Cabrio Seaside Edition son más comedidas. El salpicadero, en la zona del copiloto, luce un entramado de cuadros que imitan las olas del mar con la inscripción «30 year of Convertible». Con ella celebran